Mi mente divaga…
Llevándose con ella los restos de mí
Mi alma vuela…
Sin puerto y sin estrella
Sin rosa de los vientos sin dirección…
En un estado de enorme soledad
En un recóndito rincón de mi ser
Bajo cinco llaves…guardo mi corazón.
Lo protejo sin guardianes armados
Tiene reserva sin tiempo
Para un verdadero y gran amor.
Con algún magullón producto del temor
Con un dolorcito pequeño por una fallida ilusión
Pero sin grandes y huraños vacios
Se encuentra a la espera latiendo…sin emoción
Rodeado de celofanes de ternura
Un poco ansioso por volver a sentir
Y por latir de forma inusitada
Ante alguna presencia que lo haga intuir.
Esta resguardado por encajes de seda
Entre los sueños y fantasías del ayer
Entre cuentos de príncipes y hadas
Reposa soñando con el relato que lo hará triunfador
Sin prejuicios ni agasajos, sin pretensiones
Solo la del calor tierno e irreverente de la pasión
Que lo haga tomar las riendas de mi vida
Que le gane la carrera al pensamiento y a la razón
Que burbujee por mis venas junto a la locura
Que me regale alas, que me deje volar
Que me llene de dulce tentación
Tengo mi corazón a salvo...en espera de un amor.
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